Las máquinas no surgen solas, y detrás de cada una de ellas hay un talento impresionante. Morizumi diseñó su cortadora/enhebradora de radios basándose en su amplia experiencia en la fabricación de radios en Asahi Spoke Company en Osaka. Esta herramienta combina esa visión especial con su propia astucia. Sin duda, es uno de los dispositivos más elegantes y eficaces que he usado.
Dirige un taller unipersonal donde cada tarea se gestiona personalmente. [El Sr. Morizumi se jubiló en 2013 y falleció en 2018].
De joven, su afición eran las carreras de coches, sobre todo los karts. Ahora, su pasión es el ciclismo. Construye su propia bicicleta y la monta en vacaciones. Hoy, muchos de sus amigos también son ciclistas y les fabrica diversas piezas de maquinaria. Su único producto, en sí, es la fresadora de radios.
El taller de Morizumi es pequeño pero cómodo. La limpieza, la paciencia y unas excelentes herramientas de medición son clave para las extraordinarias tolerancias de su máquina de radios.
Construyó la fresadora como ocurre con muchos inventos de bicicletas: necesitaba radios de longitudes personalizadas. Incluso en el corazón de la industria ciclista japonesa, las longitudes específicas de radios suelen ser imposibles de encontrar. La fabricación de radios implica tiradas mínimas de 10.000 unidades. Si desea 301 mm, pero solo 32 piezas, puede que no tenga suerte. El corte y roscado manual es en realidad una extensión de la fabricación de radios, ya que la fabricación de ruedas puede ser la última etapa de la fabricación de una bicicleta, a menudo realizada en el punto de venta.
Cuando Morizumi creó esta máquina, su último pensamiento fue fabricarlas. Necesitaba una él mismo. Poco a poco, amigos envidiosos lo convencieron de que las fabricara con regularidad. Ha sido un placer para mí ofrecerlas a clientes de todo el mundo.
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